UNA ERMITA EN EL MULHACÉN PARA LA VIRGEN DE LAS NIEVES

¿Y TREVÉLEZ? Otros lugareños habían tomado la delant era en cuanto al protagonismo religioso en SIERRA NEVADA PERO TREVÉLEZ TENÍA MÁS DE UN PRIVILEGIO .Era el pueblo más alto de la sierra y  DE ESPAÑA Y EL MÁS PROXIMO A LA CIMA MAS ALTA DE LA PENINSULA . Era entonces PARROCO DE TREVELEZ FRANCISCO CASTRO SÁNCHEZ Y DE ÉL PARTIO LA INICIATIVA DE LLEVAR LA DEVOCIÓN DE SU PUEBLO Y DE LA ALPUJARRA ENTERA A LA CUMBRE DEL MULHACÉN. Y no fue el 5 o el 6 de Agosto de 1913 como se ha afirmado  repetidas  veces , sino un año antes . Así el 22 de JULIO DE 1912 EL CURA DE TREVELEZ ,ACOMPAÑADO POR UN NUMEROSO GRUPO DE VECINOS DE SU PUEBLO, CELEBRO POR VEZ PRIMERA EN LA CIMA DEL MULHACÉN EL SACRIFICIO DE LA MISA. El éxito de feligreses registrado en aquella primera peregrinación y el arrollador impulso que el propio CURA CASTRO DESARROLLA, LE LLEVARON A CONCEBIR UN PROYECTO MÁS AMBICIOSO: CONSTRUIR UNA ERMITA PARA LA VIRGEN DE LAS NIEVES EN EL MULHACÉN Y COLOCAR EL DÍA 5 DEL PRÓXIMO AGOSTO LA VENERADA IMAGEN DE LA BENDITA MADRE DEL VERBO , CUAL SOBRE UN  TRONO DE NUBES , SOBRE  EL ELEVADO PICO DEL CELEBÉRRIMO MULHACÉN.

LA VIRGEN DE LAS NIEVES Y SIERRA NEVADA.

1.- LA APARICIÓN .        Cuenta la tradicción , que el 5 de Agosto de "1717" el Beneficiado de VALOR, MARTÍN DE MÉRIDA , acompañado de su criado Martín de SOTO, SE DIRIGÍAN DESDE LA ALPUJARRA A GRANADA POR uno de los lugares más frecuentes en aquellos años de ausencia de carreteras el COLLADO DE CAPILEIRA. Cuando después de una durisima subida por la loma de PUJA comsiguieron dar vista a GRANADA ,objeto de su viaje, una tremenda tormenta se desató subitamente  en medio de un día y un cielo sereno. El agua comenzó a descargar sobre los despavoridos viajeros que, ni podían refugiarse en lugar alguno, ni correr con la esperanza , de encontrarlo.              Empapados por el agua que chorreaba en inagotable caudal. aterídos por el frío de un viento que sobre los tres mil metros acuchillaba la  piel y espantados por el incesante circular de los relámpagos y el estallido impetuoso de los truenos ,creyerón , como cuantos se han visto en trance semejante, llegado el fín de sus días y cobijados junto a una enorme roca de pizarra deshojada por la erosión se prepararón  a pasar a una vida en la que fervorosamente creían. Como un último recurso ante un final irremediable ,MARTÍN DE MERIDA pidió a la VIRGEN SU PROTECCIÓN Y SU FE OBTUVO LA RESPUESTA REQUERIDA. LA VENTISCA CESÓ DE REPENTE,pasarón los rayos y los truenos y el inmenso mar de nubes negras se disolvió en el espacio para dejar lugar a un cielo azul y a un sol cuyos haces de luz estallaban  en mil colores al estrellarse sobre las pizarras, que chorreaban aún el agua caudalosa de la tormenta ya pasada . En medio de aquel MAR DE LUZ , MARTÍN DE MERIDA Y SU COMPAÑERO CONTARON COMO PUDIERÓN VER UN RESPLANDOR DE ENORME INTENSIDAD EN CUYO INTERIOR LA VIRGEN DE LAS NIEVES EXTENDÍA SUS BRAZOS EN GESTO DE SINGULAR PROTECCIÓN.